Autor | José Javier Quintana
Javier Alonso, me ha pedido opinión sobre su candidatura e igual trato respecto a otras. Por ello me decido a escribir este post. Como llevo diciendo desde hace tiempo no tengo predilección por ninguna candidatura porque en mi humilde opinión todas se quedan cortas de miras en la definición del sector de los servicios profesionales de arquitectura. Pero eso es sólo mi opinión y asumo que puede ser quien sea yo el errado y quien se pasa de frenada.
Vayamos a la candidatura de A4C.
En primer lugar hablaré de lo que me parece destacable:
- Refundación del CSCAE. Sin duda, nosotros nos hemos cansado de reclamarlo. De ahí a dar forma a un colegio nacional de arquitectos va un mundo lleno de problemas de gestión con la administración del Estado.
- Papel protagonista de la Fundación COAM. Debe ser la herramienta comercial del colegio para relacionarse con la sociedad. Es importante que existe suficiente independencia de fundación y la Junta de Gobierno y que tenga una linea de actuación que no cambie con cada JdG.
- Canal TV. Me parece una gran idea.
- Potenciar el I+D+i es irrenunciable.
- Que los arquitectos tomen conciencia de que pertenecen al sector de la construcción como se propone en el pacto de la edificación, es absolutamente necesario. Juntos somos más. Sólos poquita cosa.
No estoy de del todo de acuerdo en:
- Eliminar el visado. No creo que esto sea bueno para la profesión, ya que el visado nos permite garantizar la consistencia documental de los proyectos. Que sea más sencillo, más ágil y mucho mas barato creo que es fácil de conseguir con las nuevas tecnologías.
- BIM como tecnologia obligatoria para visar. De acuerdo, pero para eso faltan muchos años. Creo en el BIM como tecnología de futuro y que cuando las administraciones lo exijan se implantará definitivamente. No me parece razonable obligar a todo el mundo a trabajar en BIM, primero porque está en una fase muy temprana de implantación en España (esto no es UK) y segundo porque como dice Miguel Ángel Alvarez, el BIM es más que aprender a manejar un programa, es un cambio operativo que requiere un modelo de gestión operativa adecuado.
- Establecer de forma obligatoria la necesidad de realizar cursos de formación propios para mantener el derecho a la colegiación. Una cuestión es que el colegio ofrezca una formación continua de calidad a buenos precios para el colegiado y otra que esto sea obligatorio. A mi me parece que el colegio no es quien para exigir al arquitecto ningún tipo de formación obligatoria para hacer su trabajo, por encima de la que exige el ministerio de fomento. Te pongo mi ejemplo, mira mi formación, no veo cómo la va a completar el colegio por lo que no podré hacer cursos, y no podré estar colegiado en el COAM. Hay muchas formas de ser arquitecto y todas ellas deberían estar recogidas en el colegio.
Hecho en falta las mismas cuestiones que echaba en falta en la candidatura de José María Ezquiaga.
Termino. Javier, vienes con ganas de cambiar las cosas y eso además de ser necesario es bueno. Lo realmente difícil es saber qué hay que cambiar y cuales son los tiempos para implementar el cambio. Las estructuras colegiales están diseñadas para perdurar e impedir el cambio y SI, se necesitaran personas con una visión de una profesión muy diferente a la actual.
Creo que de las candidaturas presentadas la vuestra es la única que propone un cierto cambio. Creo que las otras dos son dos buenas candidaturas para que el colegio tal y como lo entendemos siga igual, más eficiente pero igual.
Te deseo templanza y suerte y que lo que hagas sea en beneficio de los arquitectos (todos).
2 comentarios
Gracias José Javier por la valoración que haces de esta candidatura en la cual tengo la suerte de participar, especialmente por esa última consideración en la que vienes a decir que A4C es la única candidatura que sí propone un cierto cambio.
Evidentemente estoy de acuerdo en los puntos positivos que señalas y si me permites voy a puntualizar o matizar algunos, especialmente aquellos en los que no estás del todo de acuerdo.
El tema Colegio único o refundación del CSAE me da un poco igual cómo se pueda enfocar, lo cierto es que para la gran mayoría de los compañeros el CSAE es un “ente” del cual no se sabe gran cosa y sobre el que pesa la losa de su dudoso método de elección/representación con lo que al final y puesto que la relación de los arquitectos es con sus Colegios y nula o prácticamente inexistente con el Consejo creo que en un primer momento nadie lo echaría en falta si un día desapareciera. Que no niego que tenga su función, pero o “se pone las pilas” para convencernos de que realmente sirve para algo o la idea de que uno o varios de los principales Colegios de España tiren del carro (a pesar de las indudables trabas administrativas) para acercarnos a esa idea de Colegio único va a estar cada día más presente.
Lo cierto es que (al menos en Madrid) hasta ahora nadie lo había planteado y como se dice en el inicio de exposición de la parte correspondiente de nuestro programa, un gran viaje comienza con un primer paso.
El papel de la Fundación debe ser el de garante de los valores culturales de la Arquitectura, fondos y archivo históricos, difusión de valores y todo aquello relacionado con la “poética” de la profesión, dejando al Colegio la “prosa” es decir, defensa no de la Arquitectura sino de los arquitectos desde una vertiente radicalmente práctica y en la que no duela hablar de temas económicos (y ahí entraría desde el tema de honorarios, defensa de la práctica de la profesión, Pacto de la Edificación, competitividad, defensa ante la actitud de las administraciones… hasta ese anglicismo que tan mala prensa tiene pero que consideramos fundamental para conseguir todo lo demás)
No planteamos la eliminación del visado como pareces entender. La realidad es que nuestro visado es un tema farragoso, caro y lento, normalmente salpicado por requerimientos en la mayoría de los casos provocados no por carencias del proyecto sino por defectos de forma en la presentación del guión de documentación o incluso de la interpretación de ésta por el responsable del visado.
La segunda derivada es que el Colegio una vez visado un trabajo no asume responsabilidad alguna sobre la documentación por él “aprobada” por lo que lo que planteamos es primero un criterio claro de la documentación “lógica” que debe acompañar cada expediente poniendo a disposición de los colegiados modelos claros y adaptados a la variedad de trabajos que se pueden visar (no puede ser el mismo guión de cumplimiento un proyecto de 200 viviendas que una reforma de un local), aquí los colegas alemanes lo tienen meridiano con su HOAI y segundo, mantener el visado para todos aquellos trabajos que por ley se exige y todos aquellos en los que el arquitecto voluntariamente quiera visar pero sustituido por un criterio de registro y declaración autoresponsable de tramitación inmediata.
En cuanto al tema de visado BIM no se dice en ningún momento que se plantee su obligatoriedad, ya se habla de fechas de implantación, 2018 en Cataluña, 2020 a nivel europeo (es decir, en esta legislatura colegial o poco más) que quizás sufran retrasos en su aplicación, pero un día vendrá una directiva comunitaria imponiendolo y nos pillará con el paso cambiado. Por ello consideramos necesario empezar a implementarlo de manera progresiva y de paso animar a los compañeros a que vayan entrando en un nuevo sistema que se va a imponer en un futuro próximo.
Por último el tema de la obligatoriedad de mantener una formación continuada. Por si no habíamos tenido suficiente esto es un último guiño al sistema RIBA en el cual no negamos que nos gustaría vernos reflejados. Si entras en cómo definen esto nuestros colegas sajones verás que no se trata de hacer un máster al año, creo recordar que hablan de 35 horas anuales de todo tipo de actividades homologables entre las que escribir libros o artículos dar charlas o conferencias o mantener un blog profesional se considera equivalente a recibir cursos. Ya ves que por aquí no tendrías motivo de preocupación, solo se trata de animar al arquitecto a aunque sea de manera casi simbólica permanecer mínimamente vivo profesionalmente hablando.
Sobre aquello que echas en falta en nuestra propuesta y que también lo habías hecho en tu análisis de la anterior candidatura te puedo decir que “precios y concursos” entraría en el tema de honorarios, Pacto de la Edificación y Lobby. “Competitividad” también vendría de estos dos últimos apuntes y en cuanto a “funcionamiento del colegio” tú mismo lo dices, miramos al RIBA como modelo al que aspirar, si entras en nuestra página http://www.a4c.es verás una entrada al blog (comen fatal, pero algunas cosas las hacen muy bien) en el que de forma quizás demasiado esquemática se reflexiona sobre dicho modelo.
Espero no haberte aburrido y que tras esto aunque sea tímidamente sí manifiestes tu predilección por nuestra candidatura.
No creo que sea buena idea eliminar el visado. No debemos tomar esa iniciativa. Si embargo por lo carísimo que es deberíamos exigirnos un visado de mas calidad en vez de pegas tontas como si fuera una oficina administrativa. Que el visado signifique de verdad una garantía para la sociedad.
En cuanto al BIM, a mi me parece conveniente cualquier actualización siempre que exista la contrapartida de un reconocimiento de tarifas y una actualización de las mismas. Implantar el BIm en las actuales condiciones económicas de la profesión supondría la ruina para muchos de los estudios que aún no han cerrado. Hace muy poco. una Administración me obligó a aceptar hacer en BIM un proyecto de cierta entidad que había ganado por Concurso. El proyecto hecho en BIM muy avanzado como se pretendía con unos honorarios mitad de los normales me hubiera costado poner mucho dinero de mi bolsillo para hacerlo. Conseguí, mostrando las cifras, que entendieran la situación y eliminaran esa condición. La lucha esta en el reconocimiento de tarifas y honorarios dignos en España. pues la profesión no hace mas que admitir el constante aumento de tareas y responsabilidades frente a unos honorarios menguantes. No me interesa ninguna candidatura que no este dispuesta a pelear a muerte por recuperar nuestra dignidad uy ofrecer a nuestros jóvenes una perspectiva económica que ahora no tienen.