Autor | Germán Cintas Araújo.
Ya hemos dicho que el aprendizaje es básico en el proceso de crecimiento de una empresa, mucho más en su etapa de internacionalización. Recordemos que las empresas necesitan aprender y crear o fortalecer relaciones para explotar oportunidades, y dichas relaciones provienen de sus proveedores, clientes y competidores, que les proporcionan los conocimientos externos a la empresa[1].
Pero nos enfrentamos a un problema al intentar introducirnos en un entorno internacional: nuestra práctica profesional es altamente contextual, difícil de replicar en diferentes escenarios dada la complejidad de los procesos y agentes que intervienen. El éxito en la prestación de servicios y la formación de relaciones de negocio requiere el del aprendizaje de las rutinas locales y la adaptación de nuestras prácticas a la cultura y valores de la zona objetivo[2].
Hagamos un recuento de las barreras que hemos visto hasta ahora:
- Nos enfrentamos a un fenómeno de crecimiento que supone una enorme incertidumbre
- Desconocemos los procesos de internamiento en un país extranjero
- Carecemos de relaciones de confianza en dicho país
- Ignoramos los procesos y agentes relacionados con nuestra actividad
¿Cómo podemos solventar estos escollos? Pues atendiendo a lo anteriormente expuesto, necesitamos encontrar un agente localizado en el país con el que establecer una relación de confianza. Dicho agente nos ayudará a reducir el riesgo, a generar y densificar relaciones y a gestionar nuestra actividad en nuestros primeros pasos.
Este agente toma comúnmente dos formas:
- Un socio local dispuesto a establecer una relación de trabajo cooperativo (los arquitectos españoles somos muy valorados por nuestros colegas asiáticos porque aportamos cierta “exclusividad de diseño” a cambio de colaborar con ellos en los procesos de proyecto)
- Un socio nacional que ya dispone de una posición en el país extranjero y desea una relación de trabajo colaborativa (ingenierías operando en el exterior que descubren la oportunidad de ofrecer más valor a sus clientes si incorporan el trabajo del arquitecto)
[1] GLÜCKLER J. (2004). ”Reputationsnetze. Zur Internationalisierung von Unternehmensberatern. Eine relationale Therie”, transcript, Bielefeld
[2] Estudios de arquitectura españoles como LQC o CMV trabajan en Vietnam, apareciendo como idioma principal de su web el de este país en el caso de los primeros, o abocados a aprender este idioma para prosperar en el caso de los segundos.
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Germán Cintas Araújo. Arquitecto Superior por la ETSA de Sevilla. Máster en Dirección Estratégica y Negocios Internacionales. Universidad de Sevilla.
Dirección Zona Sur en bsA [Rethinking Architecture]
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[...] ¿Es necesario el socio local?, donde abogamos por las alianzas como el mejor procedimiento de entrada en otros países. [...]